Los desastres no son obra del azar, son consecuencia de la ausencia de medidas de preparación y contingencia
Desde hace un mes se están sucediendo una serie de situaciones de emergencia producto de inundaciones derivadas de lluvias y tormentas que han afectado al territorio nacional.
Al menos se tiene información de afectaciones ocurridas principalmente en los estados Sucre y Monagas, pero también en la ciudad de Caracas y el estado Zulia.
La mayoría de estas situaciones han tenido poca cobertura en los medios, debido por una parte, a la crisis política nacional que se exacerbó luego de las elecciones del 28 de julio, y por otra, a la poca cobertura de los medios tanto por razones de falta de recursos como la censura y hostigamiento sobre los periodistas.
Estos hechos ocurren dentro de un incremento global de eventos catastróficos que en su mayoría pueden ser causados o potenciados por el cambio climático.
Tal situación es una alerta de que el sistema planetario está llegando a una condición donde el cambio climático se está convirtiendo en una amenaza global sobre las sociedades humanas.
Es urgente que los gobiernos cumplan con sus obligaciones de proteger a la población de los efectos del cambio climático mediante acciones diseñadas e implementadas de manera profesional , sistemática y participativa.
En el caso de Venezuela, es necesario que el Estado deje la inacción, desidia y politización en materia climática.
No es aceptable que se siga postergando el diseño e implementación del Plan Nacional de Adaptación al Cambio Climático que por ley debía ser elaborado desde hace catorce años.
Necesitamos acción climática ¡YA!